La arenga

Por Juan Carlos Méndez Ramírez

En el corazón de Los Cabos, donde la promesa de un futuro mejor late con fuerza, se ha gestado un proyecto que trasciende la obra pública para convertirse en un verdadero faro de esperanza: la nueva Casa Cuna y Casa Hogar. Este ambicioso complejo, que representa una inversión aproximada de 132 millones de pesos, no es solo una infraestructura; es la materialización de un profundo compromiso social liderado con pasión y determinación por el alcalde Christian Agúndez Gómez y la presidenta honoraria del DIF, Sol Delgado Moreno.

La presentación de este proyecto ejecutivo marca un hito. El presidente municipal, Christian Agúndez Gómez, ha enfatizado que esta iniciativa surge de un compromiso conjunto de los gobiernos federal, estatal y municipal, respondiendo a una de las problemáticas más sensibles y urgentes: la atención a la niñez en situación de vulnerabilidad. Su convicción es clara: estos nuevos centros de asistencia social están destinados a ser una referencia en la atención integral de niñas, niños y adolescentes menos favorecidos. «Estamos completamente comprometidos. Este es uno de los proyectos prioritarios de la administración municipal y dará solución a una de las problemáticas más sensibles que tenemos», afirmó Agúndez Gómez, destacando que, gracias a la confianza y paciencia de la ciudadanía, la Casa Cuna-Casa Hogar «ya son una realidad».

A su lado, la incansable Sol Delgado Moreno ha sido una fuerza impulsora clave. Ella ha subrayado que estos espacios revolucionarios atenderán a menores desde los 0 hasta los 17 años, representando un paso fundamental en la protección, el bienestar y la garantía de derechos de la infancia que se encuentra en condiciones de abandono o maltrato. Su visión va más allá del simple albergue; busca brindar las herramientas necesarias para que estos niños puedan desarrollarse plenamente y construir un futuro mejor. Con palabras que resuenan con emoción y verdad, Sol Delgado expresó: «El proyecto está pensado en las mejores condiciones técnicas, pero sobre todo en el bienestar de la niñez y adolescencia en situación vulnerable. Gracias a esta suma de voluntades y al compromiso del DIF, hoy nuestras niñas y niños conocen lo que siempre debió ser para ellos: el amor». Esta frase encapsula la esencia del proyecto: un lugar donde la vulnerabilidad se transforma en oportunidad a través del afecto y el apoyo integral.

La magnitud de este proyecto es impresionante. Como detalló Arturo Sandoval, director municipal de Proyectos Estratégicos, el complejo abarcará 17 mil 398 metros cuadrados en tres terrenos estratégicamente ubicados en la colonia Monte Real, en San José del Cabo. Su diseño, con forma de sol, es un poderoso símbolo de vida y esperanza, reflejando la luminosidad que Agúndez y Delgado Moreno buscan infundir en la vida de estos niños. Las instalaciones serán de primer nivel, incluyendo áreas administrativas, dormitorios, comedores, lavanderías, espacios de salud, salas de visita, amplios espacios verdes y múltiples áreas recreativas. La Casa Hogar, además, contará con una cancha de usos múltiples, ciclovía, centro de estudios y un centro de música, elementos cruciales para un desarrollo holístico.

Este monumental esfuerzo ha sido posible gracias a la suma de voluntades, destacando el apoyo especial de la Fundación BRISAS, cuyo presidente, Antonio Cosío, ha anunciado que la organización estará a cargo de la primera etapa de construcción, reiterando su compromiso con un espacio digno para la niñez. Con el inicio de la obra previsto para este mismo mes de septiembre y una fecha de conclusión estimada para abril de 2026, Los Cabos se prepara para presenciar un proyecto que marcará un antes y un después en la atención de la niñez y adolescencia vulnerable.

El liderazgo de Christian Agúndez Gómez y la sensibilidad de Sol Delgado Moreno están construyendo más que edificios; están erigiendo un legado de compasión, dignidad y futuro para quienes más lo necesitan. Esta Casa Cuna y Casa Hogar no es solo una promesa cumplida; es la demostración palpable de que, con visión y corazón, Los Cabos se convierte en un lugar donde el bienestar de cada niño es una prioridad innegociable.