La arenga

Por Juan Carlos Méndez Ramírez

La seguridad pública es, sin duda, el pilar fundamental sobre el que descansa el bienestar y el desarrollo de cualquier comunidad. En Baja California Sur, esta premisa ha sido reiterada como una prioridad por el gobernador Víctor Manuel Castro Cosío, y los recientes encuentros de la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz, como el celebrado recientemente con la participación de altos funcionarios federales como el Secretario de Marina y un representante de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, no hacen más que confirmar el compromiso inquebrantable de la administración estatal con este objetivo.

La visión del gobernador Castro Cosío respecto a la seguridad es clara y estratégicamente acertada: debe abordarse de manera transversal y coordinada entre los tres órdenes de gobierno. Esta perspectiva reconoce que la complejidad del fenómeno delictivo exige la suma de esfuerzos, recursos y capacidades, superando visiones parciales o enfoques aislados. Su presencia y la de alcaldes, jefes policiales municipales y autoridades federales en estas mesas de coordinación es la prueba tangible de esta voluntad de unidad que busca garantizar la tranquilidad y el bienestar de las familias sudcalifornianas.

Es particularmente relevante el reconocimiento explícito del gobernador al respaldo permanente del Gabinete de Seguridad Nacional y al trabajo conjunto de las fuerzas estatales, municipales y las instituciones federales como la MARINA, DEFENSA, Guardia Nacional y la FGR. Este reconocimiento no es un simple formalismo; en el ajedrez político, destacar y valorar la colaboración federal es un movimiento inteligente que fortalece la relación con el centro y asegura la continuidad y profundización del apoyo necesario para el estado.

Los resultados de esta coordinación no son menores. Tal como se presentó en la reunión, los esfuerzos conjuntos han sido clave para que Baja California Sur se mantenga como uno de los estados con mayor tranquilidad en el país. Este dato, lejos de ser una mera estadística, es el reflejo del impacto directo de las estrategias implementadas en la vida cotidiana de los ciudadanos. Que el gobernador pueda resaltar estos logros anclados en la colaboración interestatal e interinstitucional, refuerza su imagen como un líder efectivo que no solo diagnostica el problema, sino que articula las soluciones necesarias.

Llama la atención, la mención que hace el gobernador Castro Cosío sobre el compromiso inmediato de la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, y su instrucción para implementar operativos específicos para atender puntualmente temas de seguridad, tiene una importante lectura política. Demuestra que el gobierno estatal está en sintonía y tiene un canal de comunicación directo y efectivo con la nueva administración federal en un tema prioritario para ambas partes. Al alinear la estrategia estatal con la política federal de «construir una Paz duradera en todo México», el gobernador Castro no solo asegura el respaldo, sino que también proyecta una imagen de liderazgo responsable y articulado a nivel nacional.

En sintesis, la participación activa y el discurso del gobernador Víctor Manuel Castro Cosío en la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz ilustran un liderazgo enfocado, colaborativo y estratégicamente posicionado. Su énfasis en la coordinación, el reconocimiento al invaluable apoyo federal y su capacidad para articularse con la nueva presidencia en un tema tan sensible como la seguridad, son elementos clave que fortalecen su gestión y abonan significativamente a la construcción de la paz y el bienestar que Baja California Sur merece. Su enfoque, respaldado por los resultados de mantener al estado entre los más tranquilos, se presenta como el camino correcto para consolidar un futuro seguro para todos los sudcalifornianos.